Blefaroplastia sin Cirugía

Según la RAE, Blefaroplastia es la “restauración del párpado o de una parte de él por medio de la aproximación de la piel inmediata”.

Clásicamente se denomina blefaroplastia a la cirugía que busca rejuvenecer los párpados mediante la remodelación de los tejidos perioculares, básicamente consiste en eliminar el exceso de piel sobrante y resecar el exceso de tejido graso.

Se realiza fundamentalmente por razones estéticas, pero en algunos casos los motivos son también visuales (blefaroplastia funcional) ya que la caída de la piel de los párpados superiores puede ocasionar una reducción del campo visual.

Con las nuevas técnicas de láser fraccional y sobre todo con la tecnología plasma (Plex´r), podemos “restaurar el párpado”, sin necesidad de realizar una técnica quirúrgica.  Es una técnica no ablativa que consigue evaporar pequeños fragmentos de piel sin incisiones ni hematomas. Se basa en la creación de un pequeño arco eléctrico, similar al que se produce en las tormentas, por la ionización de los gases que contienen el aire. Se produce una “sublimación “  superficial de los tejidos sobre los que se aplica, que no se transmite a los tejidos de alrededor, lo que le confiere precisión y seguridad.

Una vez establecida la necesidad de realizar el tratamiento, se aplica anestesia en crema tipo “EMLA”, retirada ésta procederemos a la realización de la técnica plex´r, que consiste en aplicar la tecnología plasma en múltiples puntos de tamaño inferior a la cabeza de un alfiler. En las horas inmediatas, el párpado aparece con un ligero edema y se formarán pequeñísimas costras, que irán cayendo, entre el sexto y octavo día, dejando una piel nueva, sin ninguna señal.

Está indicado sobre todo en personas que tienen exceso de piel en párpado, que le producen aspecto cansado y envejecido. Puede usarse también para corregir arrugas peri oculares (patas de gallo) y arrugas del párpado inferior, logrando una “Blefaroplastia no quirúrgica”.

Esta técnica puede complementarse con tratamientos, como la toxina botulínica, cuando predominan las arrugas de expresión.  Si además hay importantes bolsas grasas que eliminar, tendremos que recurrir a otras opciones para lograr reducir el tamaño de los depósitos grasos.

La blefaroplastia inferior busca reducir las bolsas grasas en la zona y tensar la piel bajo el ojo. Es una intervención muy agradecida puesto que devuelve a los ojos vivacidad y elimina el aspecto de cansancio.

La tendencia actual es conservar al máximo los tejidos, por lo que puede abordarse por una pequeña incisión en la zona de las pestañas: Técnica Subciliar, o mediante Técnica Transconjuntival, en la que la incisión se realiza en el fondo del saco conjuntival. Eliminadas las bolsas, podemos tensar la piel del párpado con láser o plex,r.

En ocasiones, si la bolsa no es muy grande, es suficiente actuar sobre el surco naso-yugal (ojera), con materiales de relleno como la grasa o el colágeno, para reponer volúmenes y conseguir un aspecto óptimo.

 Con la tecnología plex´r podemos además eliminar Xantelasmas (acúmulos de colesterol en piel del párpado), pequeñas verruguitas, siringomas y otras lesiones cutáneas benignas, para devolver a los párpados un aspecto joven y sano.

La blefaroplastia, restauración del párpado, es pues, hoy posible sin cirugía, y en los casos en que ésta sea necesaria, hablamos de técnicas mínimamente invasivas, pero con las que se logran los mejores resultados y siempre con la máxima seguridad.

Blefaorplastia, rejuvenecimiento de párpados, dra. Paloma Tejero

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