Tradicionalmente, la relación entre disfunción eréctil y cardiopatía isquémica está bien establecida y definida, ya que más de la mitad de los hombres con infarto de miocardio presentan disfunción eréctil. Sin embargo, lo que no se había analizado hasta la fecha era la prevalencia de la cardiopatía isquémica silente (no diagnosticada) en pacientes diabéticos sin antecedentes de patología cardiovascular y su relación con la disfunción eréctil como primera señal de la presencia de daño arterial.

Los diabéticos tipo 2 que presentan disfunción eréctil parecen tener un mayor riesgo de patología cardiovascular, según un estudio publicado en Journal of Sexual Medicine realizado por investigadores del Hospital Peset y la Fundación para la Investigación, ambos en Valencia.

Señal de alarma de Disfunción Erectil en pacientes con Diabetes.

Según este trabajo, publicado en The Journal of Sexual Medicine, la presencia de la disfunción eréctil en pacientes diabéticos multiplica por cuatro la aparición de cardiopatía isquémica silente respecto a pacientes sin esa disfunción, lo que prueba su validez como buen predictor de un futuro deterioro de las arterias a nivel general y como marcador de riesgo de patología coronaria en diabéticos.

En la práctica, dados estos hallazgos, los investigadores apuntan que debe considerarse como la primera señal para que el paciente sea controlado y se realice las pruebas pertinentes para evitar un infarto, ictus o cualquier otro tipo de accidente vascular.

Previamente, los investigadores ya pudieron comprobar desde el principio el impacto que tenía el fenómeno entre los diabéticos, ya que el 68,2 por ciento de los participantes en el estudio lo presentaban (el 46,7 por ciento de ellos en un grado grave). Tras esa división, se les realizaron diversas pruebas (electrocardiograma, ecocardiografía, monitorización con Holter y pruebas de esfuerzo) para diagnosticar posibles daños coronarios (arterioesclerosis o endurecimiento de las arterias que dificulta el flujo sanguíneo) y en aquellos pacientes en los que se detectó algún tipo de afectación se realizaron angiografías y cateterismos cardiacos para solucionar los problemas cuando era necesario.

Los resultados de estas pruebas revelaron que los pacientes con diabetes tipo 2 y disfunción eréctil en distintos grados presentaban cuatro veces más cardiopatías isquémicas silentes que aquellos con diabetes tipo 2 sin disfunción eréctil (concretamente, la cardiopatía isquémica silente fue diagnosticada en el 18,1 por ciento de los diabéticos con disfunción eréctil, frente al 4,1 por ciento en el grupo sin este trastorno).

Según los profesionales, dado que el resto de parámetros estudiados (hipertensión, enfermedad vascular periférica o colesterol, entre otros) no presentaban diferencias significativas entre ambos grupos, la conclusión es que la disfunción eréctil aparece como predictor de ese daño vascular (de hecho, sólo dos de los pacientes en los que se detectó patología cardiaca no tenían problemas de erección).
(Leer La disfunción erectil alerta sobre una Futura Patología Cardiaca)

Inicio de las alteraciones en el Endotelio y Disfunción Erectil.

La aparición de la disfunción eréctil (DE) en un paciente con diabetes, independientemente de la edad, indica que se ha alterado el endotelio (capa que recubre interiormente las arterias), lo que impide la correcta vascularización de los cuerpos cavernosos del pene.
Dado que la disfunción endotelial en el pene es clínicamente evidente mucho antes que en otras zonas (sólo esa alteración del endotelio es suficiente para causarla), esa situación es, en la práctica, la que posibilita que pueda emplearse como primer marcador de riesgo.
La Disfunción Erectil es un trastorno que afecta negativamente a la calidad de vida de los varones que la padecen.
Su prevalencia varía entre países, culturas y razas: entre el 10 y el 52 por ciento en hombres de entre 40 y 70 años, con una incidencia en Occidente de 25-30 nuevos casos por 1.000 habitantes/año.

Artículo de: Dr. François Peinado
Urologia | Especialista en Andrología y Salud del Varón